Informe de CNMV sobre los informes financieros de 2021

La CNMV publicó el 16 de marzo el Informe anual sobre la supervisión de los informes financieros anuales de los emisores de valores que:

• Recoge las conclusiones tras la supervisión de los informes financieros de 2021 remitidos por 136 emisores.

• Anuncia las áreas prioritarias de supervisión para las cuentas de 2022, destacando las cuestiones relacionadas con el clima, la invasión de Ucrania y el entorno macroeconómico actual.

Por su interés, destacamos el análisis realizado en 2022 sobre (a) el modo en que los emisores consideraron los riesgos climáticos al preparar sus estados financieros de 2021 y (b) la coherencia entre el contenido que incluyeron en el informe financiero anual y en el informe de sostenibilidad o estados de información no financieros (EINF). A continuación, apuntamos algunas de las conclusiones de este análisis que la CNMV tiene previsto continuar en 2023 respecto del ejercicio 2022:

• La calificación de las cuestiones medioambientales como “relevantes” en el informe anual y como “asunto material” en el EINF debe ser coherente. En 2021, un 19,2 % de los emisores aparente no mantuvo esta coherencia en la calificación aunque, en algunos casos, se debió a que el emisor consideraba el cambio climático como una oportunidad y no como un riesgo.
  
  ESMA espera que los emisores que concluyan que las cuestiones relacionadas con el clima no son materiales, indiquen expresamente esta circunstancia y detallen los juicios y estimaciones que se han tenido en cuenta para alcanzar esta conclusión.

• La identificación de los riesgos climáticos debe realizarse con una perspectiva a largo plazo dado que una parte significativa de estos riesgos podría materializarse en un espacio temporal amplio. En 2021, un 64,7% de los emisores contempló un horizonte entre 2030 y 2050 y, en algunos casos, superior. La mayoría de los emisores solo identificó el horizonte temporal empleado en el EINF y la CNMV advierte que debe identificarse también en el informe financiero anual.

• Los riesgos climáticos deben tenerse en cuenta en la realización de los test de deterioro (p.ej., indicios de deterioro derivados de cambios regulatorios o cambios en la estrategia del emisor). La CNMV considera relevante que los emisores incluyan en el informe financiero anual información que permita entender: (a) qué activos podrán seguir utilizándose en su estado actual en un contexto futuro de descarbonización; (b) cuáles necesitarán ser adaptados o sustituidos, junto con el enfoque utilizado en los test de deterioro; y (c) si ha sido necesario reestimar la vida útil de los activos en algún caso. Esta información es especialmente relevante en el caso de entidades que realizan actividades relacionadas con el uso de combustibles fósiles.

•  La información requerida por las NIIF sobre asuntos relacionados con el clima debe facilitarse en una sola nota o en un índice que indique las diferentes notas que abordan asuntos relacionados con el clima.

Ver publicación relacionada: Post | Informe de CNMV sobre la información no financiera de 2021.