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SuscribirmeEl concepto de Metaverso ha cobrado una indudable relevancia en los últimos años, tanto en el ámbito tecnológico como en el cultural. Se trata de un entorno virtual que pretende integrar múltiples plataformas digitales, ofreciendo una experiencia inmersiva, persistente e interactiva a sus usuarios.
Sin embargo, el desarrollo del Metaverso plantea importantes desafíos jurídicos, especialmente en materia de propiedad intelectual e industrial (“PI”), en la que los tribunales ya han tenido la oportunidad de pronunciarse en el caso marcario de Hermès contra los Metabirkins, o en el reciente caso sobre NFTs y derechos de autor protagonizado por Mango.
En este sentido, resulta de gran interés el reciente informe "IP and Metaverse(s)", encargado por la Oficina de Propiedad Intelectual del Reino Unido (‘IPO’, por sus siglas en inglés) a un grupo de expertos, que se publicó el pasado 7 de marzo de 2024, y que tiene como objetivo analizar las posibles implicaciones de PI relacionadas con el desarrollo del Metaverso.
En este informe se ofrece una visión general del concepto de Metaverso, sus posibles modelos de organización (descentralizado, centralizado o híbrido), sus características distintivas (escalabilidad, persistencia, interoperabilidad e inmersión) y su relación con las tecnologías inmersivas (VR, AR y XR).
Además, por un lado, se revisan los retos de PI que persisten desde la era de Internet –como los desafíos de jurisdicción y aplicación, la protección de los derechos de autor, marcas, patentes, diseños e indicaciones geográficas, así como los límites y excepciones aplicables–, y se señala la relevancia de estas cuestiones en el contexto del Metaverso, ya que este se configura como una matriz compleja de productos y servicios de PI, que determinan cómo se crea, se llena de contenido y se experimenta el entorno virtual. En el informe se abordan, también, algunas de las cuestiones jurídicas que suscita el contenido generado por los usuarios, la propiedad virtual, los NFTs, los acuerdos de licencia, y la responsabilidad de las plataformas.
Y, por otro lado, se analizan las características específicas del Metaverso que tienen un impacto en la PI, como la interoperabilidad, la descentralización o centralización, la convergencia de lo físico y lo digital y la multiplicidad de contribuyentes. Se analiza cómo estas características pueden afectar a los derechos y obligaciones de los usuarios, los creadores, los proveedores y los intermediarios del Metaverso, así como a las posibles soluciones contractuales o tecnológicas que puedan adoptar los agentes económicos si el régimen actual de PI no satisface sus necesidades comerciales.
Finalmente, se ofrece un análisis y unas recomendaciones sobre el papel de la PI en el desarrollo del Metaverso. Se concluye que el Metaverso supondrá un aumento del uso y la demanda de PI, y que la PI determinará las experiencias de los usuarios y las empresas en el entorno virtual. Se sugiere que el derecho de PI es fundamental para el éxito del Metaverso y que debe mantenerse como una salvaguardia para los ciudadanos digitales, respetando los principios de equilibrio, proporcionalidad, flexibilidad y diversidad cultural.
Por último, se resalta la importancia de una mayor colaboración entre los actores públicos y privados para abordar los desafíos que plantea el Metaverso, dado su carácter transfronterizo y multidimensional. Asimismo, el informe reconoce el papel de la Unión Europea como un actor clave en el ámbito digital, y destaca la necesidad de armonizar las normas de PI con las de la UE, especialmente en materia de privacidad y protección de datos. Además, señala la oportunidad de reformar la legislación de PI del Reino Unido tras el Brexit para adaptarla a los desafíos que plantea el Metaverso, aprovechando la mayor autonomía normativa del país.
Este informe es una valiosa aportación al debate sobre el futuro del Metaverso y su regulación jurídica. Y se trata, en definitiva, de una pieza relevante para la comprensión del futuro de la PI en la era digital.Autores: Albert Agustinoy, en colaboración con Mireia Sala.
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