No te pierdas nuestros contenidos
SuscribirmeLas compañías locales requieren buscar fuentes de financiamiento que les permitan mantener un nivel adecuado de competitividad en el mercado para desarrollar y consolidar sus operaciones. Dichas fuentes de financiamiento se dividen en fuentes de financieamiento internas y fuentes de financiamiento externas.
Dentro de las fuentes de financiamiento internas, tenemos los financiamiento con recursos de los mismos accionistas o socios de las compañías, ya sea para su puesta en marcha (i.e., el aporte del capital inicial) o para el desarrollo de sus actividades (i.e., préstamos de accionistas, aportes de capital o capitalización de resultados), sin necesidad de acudir a terceros, como a empresas del sistema financiero local.
Respecto a las fuentes de financiamiento externas, tenemos a aquellos recursos que las compañías obtienen de terceros para financiar sus operaciones. Históricamente, las fuentes de financiamiento externas se han dividido en dos tipos de financiamiento: (i) financiamiento indirecto a ser obtenido mediante alguna empresa intermediaria, sea que ésta forme parte del sistema financiero local o del exterior u otro tipo intermediario que se dedique a colocar fondos para financiar actividades económicas, como por ejemplo los denominados fondo de inversión; y (ii) financiamiento directo a través del mercado de valores.
Ver capítulo completo en: Derecho del Comercio Internacional Peruano. Esplugues Mota, Carlos (Dir.). Valencia: Tirant lo Blanch, 2022.
No te pierdas nuestros contenidos
Suscribirme